El Grafoanálisis,
una técnica eficaz en la selección de personal
La
Grafología es una disciplina, basada en la psicología
del gesto y de la expresión, que estudia los signos gráficos
de la escritura individual, y los somete a observación,
clasificación e interpretación, deduciendo de ese
modo las características que conforman la personalidad
del analizado.
Esta
técnica puede aplicarse a todas las situaciones en que
es necesario el conocimiento de lo que llamamos "carácter"
individual. Por ejemplo en selección de personal, promoción
en las empresas, orientación profesional; estudio de enfermos,
alumnos, delincuentes; estudios histórico-biográficos;
estudios relativos a la adaptación y armonía entre
personas, etc.
Las
grandes empresas (y también las medianas y pequeñas)
de todos los países desarrollados, solicitan constantemente
los servicios de la grafología para la selección
de personal calificado.
La
ventaja de la grafología no sólo estriba en la abundancia
y rapidez de los resultados, sino además en el hecho de
recoger directamente, del propio analizado, sin intermediarios,
un material rico en datos, sin que se necesite la presencia del
sujeto para realizar el estudio, lo que supone una gran comodidad,
tanto para el analista como para la persona analizada.
- Escribir
sobre una hoja lisa de papel blanco sin rayas ni márgenes
impresos.
- No
hacerse trampa.
- No
hacer escribir la carta a otro.
- No
colocar debajo un papel rayado. El grafoanalista lo detecta
rápidamente.
- Usar
la lapicera o birome que se utiliza habitualmente.
- Escribir
la carta durante un momento tranquilo, evitando así
interferencias en la interpretación.
- La
extensión de la carta debe ser de por lo menos
15 renglones.
- Respetar
la inclinación natural a escribir con letra cursiva
o tipo imprenta, aún cuando signifique "sacrificar"
claridad.
- Firmar
en la forma habitual completa, no con formas abreviadas.
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